miércoles, 3 de diciembre de 2008

Comentario crítico Silvana Suérez

Para comenzar mi comentario haré un pequeño resumen de los que esté plantea, se expone la relación del concepto autoridad y capital social. Sugiriendo la importancia de pensar el origen e impacto de las normas en la conducta racional de las personas naturales en relación con los actores corporativos.
La tesis de Coleman es que se debe rechazar el propósito “a nivel de sistema, pero no al nivel de los actores que lo componen”. Por tanto manteniendo una explicación funcional de forma parcial ; las acciones de los actores son causadas por sus consecuencias , por lo tanto provienen de las expectativas de las consecuencias.
El autor pretende entender al actor como una entidad que busca metas, con una parte receptoras y otras actuantes. Por tanto entiende que la tarea de la sociología es explicar que orden se genera a nivel social como resultado de la acción intencional de los actores, tanto si son personas físicas como si actores corporativos.
Es importante decir que Coleman no se conforma con señalar y fracaso de Parsons y otro teóricos, sino que, intenta dar una explicación histórica de este fracaso. Por tanto, nos plantea la irrupción masiva de los actores corporativos, que demandan la información precisa para construir y sostener mercados nacionales, la técnica del sondeo mediante el muestreo especialmente, lo que eliminará la preocupación por la acción intencional que se daba en la sociología pre-parsianas.
Otro punto fundamental y que no fue mencionada en la reseña es, que el autor quiere despegarse de la sobrestimación que hacen las teorías que conceden el poder total a las estructuras de moldeamiento de los actores. Lo que se llama la concepción supersocilaizada dela actor de la teoría parsiana y la concepción infrasocializada de los actores que poseen en la economía neoclásica.

Comentario Cristóbal García

James Coleman en su ensayo Theory Social Research, and Theory of Action afirma que en la construcción de una teoría es necesaria la investigación, al igual que la investigación social requiere de teoría. En este sentido Coleman cita a Parsons quien recurrió a autores clásicos como Weber y Durkheim para elaborar su teoría voluntarista de la acción, en donde la acción individual es guiada por las orientaciones normativas. Así la teoría social relaciona al individuo con la sociedad y sus sistemas, en este punto Parsons abandonó su teoría de la acción por no poder conjugar la acción del individuo con la acción sistémica y se dedicó solo a la interpretación de los sistemas sociales. De esta manera Coleman sostiene que la ambición de Parsons al hacer su teoría más macrosocial falló en el intento. En vez de eso Coleman sugiere una aproximación teórica microsocial como por ejemplo las tribus o clanes, en la teoría de Parsons.
En este contexto Coleman señala que las acciones de los individuos son emitidas por sus propias consecuencias, por lo que las acciones del sistema son emitidas por los propios actores sociales de manera independiente, que a su vez forman el sistema social. Entonces Coleman dice que la acción social esta determinada por las leyes o normas que controlan la conducta del actor social. Por lo tanto pasa de lo Micro a lo Macro, es decir desde las acciones individuales hasta el esquema metodológico. Como por ejemplo Los Católicos se guían por sus valores que otorga la Biblia sobre lo que esta bien o mal. Otro caso son las orientaciones de los economistas que se guían por las reglas del Capitalismo. De esta manera en un contexto macro existe una autoridad y derechos en los actores sociales, esto tiende a producir la subordinación de un actor a otro. Además Coleman señala que la colectividad macro los actores no persiguen fines individuales sino mas bien colectivos. Por otro lado a nivel Micro los actores sociales tienen mayor libertad y son más individualizados.
En base a lo expuesto Coleman menciona que es necesario que el teórico social investigue las acciones de los individuos así como también los cambios en las sociedades y fenómenos como la individualización o la globalización. Siempre utilizando teoría e investigación social juntas.

Comentario Cristóbal García

En el siguiente comentario se expondrá la visión de Scott Lash en contraste con la de Giddens y Beck en procesos que conlleva la modernidad reflexiva. De esta manera los tres autores mencionan que la modernidad reflexiva sucede a la modernidad simple, en donde los actores sociales son capaces de reflexionar sobre sus actos como los de otros. En este sentido Lash menciona que con la modernidad reflexiva se crean redes sociales que permiten potenciar al individuo, es decir, que no este sometido como en la modernidad simple y este situado en una política de democracia rural. Estos procesos nos dice Lash dan como resultado una individualización otorgándole autonomía al individuo. Sin embargo, Giddens en este punto menciona que aún pueden existir diversas formas de sometimiento dado por las estructuras, que en la modernidad simple eran la iglesia o la comunidad aldeana. En cambio Lash menciona que en la modernidad reflexiva las nuevas estructuras son la burocracia gubernamental o los sindicatos que son de carácter colectivo, en donde se forman relaciones abstractas en las sociedades en donde no ocurre sometimiento.
En este contexto Lash señala que los individuos ya no están sujetos a las estructuras guiándose por normas y reglas, es decir no están inmersos a actuar de una determinada manera. No obstante Giddens y Beck mencionan una sociedad en riesgo en donde sí existe un grado de sometimiento por parte de las estructuras impuesta por los sistemas de expertos o profesionales. Lash responde que por medio de la autoreflexividad, que Giddens asume una confianza en los sistemas expertos y Beck una desconfianza hacia ellos, se forma una comunidad en donde las agencias reflexionan sobre si mismas generando oportunidades de vida.
De esta manera los riesgos asociados con el peligro que se enfrentan los actores sociales en la modernidad reflexiva son para Giddens como para Beck la principal razón de que exista inseguridad, sin embargo, Lash menciona que esto se debe a una sociedad individualizada en donde se deben aceptar los riesgos en la vida cotidiana, descartando la visión de Giddens y Beck acerca de la confianza y desconfianza respectivamente en cuanto los expertos en la sociedad reflexiva.

Cometario crítico Cristóbal García

En el texto La Estructura de la Acción Social Parsons construye su teoría voluntarista de la acción con el aporte de cuatro autores clásicos que han sido considerados los grandes teóricos del siglo XX, destacándose algunos en economía o en la sociedad, tales autores son Alfred Marshall, Vilfredo Pareto, Emilie Durkheim y Max Weber. Parsons escogió a estos autores con el supuesto de que ninguno tiene una influencia mutua en sus teorías, siendo Weber el principal aporte con la acción racional. Sin embargo, el análisis de Parsons basado en estos autores, no aporta mucho a su teoría voluntarista de la acción, sino mas bien realiza un resumen de los principales enunciados de los teóricos como se expondrá a continuación.
1) En primer lugar Marshall utiliza el esquema utilitarista en donde se emplea el método medio y fin del actor racional. De esta manera el autor sostiene que son las actividades, bajo el dominio de las necesidades, las que orientan los valores. Así las actividades para Marshall contribuyen a un orden económico. En este contexto Parsons utiliza el aporte de Marshall de las actividades para el desarrollo de la orientación normativa.
2) En segundo lugar Pareto aporta la distinción entre acciones lógicas, que se ajustan los medios a un fin, y acción no lógica en donde los medios no se ajuntan al fin y no existe satisfacción del actor social. De esta manera Pareto observaba a la sociedad como un sistema en equilibrio en donde existen partes interdependientes.
3) En tercer lugar Durkheim no cataloga las acciones en racional o irracional, en donde le quita la carga valorativa de las acciones y dice que estas no se orientan hacia fines. De esta manera Durkheim solo se enfoca en los hechos sociales que son externos al sujeto y que estos condicionan su acción.
4) Por ultimo Weber carga de racionalismo la acción valorativa cerrando el enfoque voluntarista debido a que la acción valorativa es igual de racional que el de acuerdo a fines. Esta el la línea de la acción y del orden mas adecuada. Además Weber introduce la acción social que Parsons utiliza en su teoría voluntarista hacia las acciones de los individuos que consiguen fines racionales.
De esta manera Parsons es el continuador de la escuela voluntarista al mostrar a la escuela sociología norteamericana los valiosos aportes de los teóricos clásicos europeos.
Entonces para que exista orientación normativa es necesario un consenso social valórico normativo del orden social. Con el esquema idealista Parsons entrega un orden ideal que no es concreto, otro orden que se deriva del esquema idealista es el racional. Así la escuela que toma en consideración todos los elementos de la acción es la voluntarista y de esto se extrae un orden consenso valórico normativo. Para Parsons esta es la única manera de explicar el orden social y tiene su origen en la teoría clásica.

Reseña Cristóbal García

Talcott Parsons inauguró la teoría moderna cambiando la pregunta y desarrollando una teoría general. A él no le interesan los problemas políticos o económicos, sino más bien como es posible el orden social en cualquier sociedad. El problema complejo acerca del orden social se debe ir descomponiendo hasta llegar a lo central que Parsons denomina lo atómico metodológico. De esta manera menciona que las sociedades construyen instituciones que coartan las acciones de los individuos, vivir en una sociedad implica cierto sometimiento ya sea por estructuras jurídicas o morales. En base a esto Parsons busca desarrollar una teoría en donde se explique una sociedad que ha sido confrontada con la posibilidad de autoexterminio, como por ejemplo la segunda guerra mundial, que debido a su incremento se forman sociedades poco afables.
En este contexto Parsons es importante pues consolida un modo de análisis social que busca comprender la sociedad, lo que es importante para el desarrollo de la sociología funcionalista del siglo XX cuyo fin es construir una teoría social que suceda a los teóricos clásicos como Durkheim, Weber o Marx, por lo cual postula su afamado libro La Estructura de la Acción Social. En este sentido Parsons tiene como propósito elaborar una nueva teoría de la sociedad, teniendo como apoyo las crisis mundiales que han acontecido el siglo XX en especial la segunda guerra mundial
Parsons propone no distanciarse de la teoría de la acción, entonces en el Acto-Unidad se compone de un actor que puede ser un grupo, persona o una institución que se enfrenta a una situación hipotética, como las protestas estudiantiles o la crisis económica que son condiciones exteriores del actor. Así Parsons sostiene que cada actor tiene la capacidad de tener cierta autonomía, cierta voluntad es decir detrás de cada acción existe un propósito, algo buscado. El Acto Unidad junta los actos ideales y los materiales que se traducen en la dimensión subjetiva y la dimensión objetiva respectivamente.
En este contexto los actores sociales no pueden necesariamente lograr una propuesta de manera autónoma. Por ejemplo los secundarios si por ellos fuera podrían haber cambiado el sistema educativo bajo sus condiciones, sin embargo, tienen que acudir a las instituciones para lograr sus objetivos. Un actor social siempre va a tener ciertos fines de la acción que realiza, pero a juicio de Parsons el actor no puede alcanzar sus fines por medio de la voluntad. Siempre los actores se enfrentan a situaciones de carácter natural y social, que son externos de cada actor. Entonces los actores se encuentran con restricciones que lo limitan y que son externos a él, así los mismos actores pueden llegar a cambiar las condiciones materiales a través de medios para llegar a un fin.
Existen según Parsons condiciones inalterables que poseen medios para alcanzar su fin. Hay también un tercer elemento que son las normas las cuales juzgan y orientan la acción de un actor, estas normas pueden ser de carácter moral o legal, en donde existen pautas que guían nuestra acción que son provistas por la propia sociedad. La existencia de actores implica que existan normas, con el fin de que se pueda conducir la acción, siendo los propios sujetos quienes crean sus normas de acción.
Los fines de la acción, la voluntad y las normas son de carácter subjetivo en cambio los medios y las condiciones son de carácter objetivo. De esta manera Parsons intenta restaurar las pautas de acción y de norma como también reconocer la exigencia de estructuras sociales. El desarrollo teórico de Parsons se traduce en un sistema de acción, se observa a la sociedad como sistema que cumplen funciones. En el funcionalismo el concepto que resalta es la función, la satisfacción de una necesidad, para la existencia y la permanencia de un cierto hecho. De este modo el funcionalismo observa a la sociedad como un conjunto de estructuras que cumplen funciones, su principal función es la organización y supervivencia de la sociedad. Esta perspectiva se aproxima a lo social desde cierto punto de vista orgánico, es decir, los organismos sociales no existen para desaparecer, sino para existir y autosostenerse. De esta manera es la sociedad la que genera las condiciones para que ella misma se pueda sostener.
En este sentido es necesario preguntar ¿Cómo se mantiene la coacción social? O ¿En que medida las distintas partes de la sociedad se mantienen en conjunto? Pues bien las sociedades evolucionan y se ven enfrentadas a nuevos cambios sociales. Así uno de los preocupaciones de Parsons es saber como sobrevive una sociedad y como mantiene a la vez el equilibrio social. Por lo tanto Parsons menciona que los individuos tienen propósitos que están vinculados a situaciones externas ellos. Así su teoría pretende desarrollar un sistema teórico que concibe a la sociedad como un sistema que se encuentra inserto en un medio. De esta manera la acción social se organiza como un sistema, el sistema de la acción, que seria un modo de acción duradero y estable de la interacción de los actores con las circunstancias con los que ellos se ven enfrentados. En base a esto lo esencial en la teoría de Parsons es el Acto-Unidad, en donde toda acción que realizan los actores sociales tiene un fin determinado y se da en una situación que posee medios y condiciones. Los medios pueden ser controlados por el actor en cambio las condiciones no pueden ser modificadas por él. De acuerdo a esto existe un componente que ordena estos elementos que son las orientaciones normativas.

jueves, 27 de noviembre de 2008

Cometario Felipe Díaz

En cuanto a este texto, no podemos hacer un comentario acerca de la forma en la que fue reseñada, ya que no se encontró reseña, así que se hará una crítica al texto mismo, el cual habla principalmente de dos temas al principio: Los llamados “cyborgs” para luego introducirnos el tema del feminismo socialista.
Por “cyborgs” la autora del texto entiende que son organismos cibernéticos, o sea híbridos entre máquinas y organismos, creaturas de realidad social y al mismo tiempo de ficción (donde por realidad social entendemos que son nuestras relaciones sociales vividas, nuestra construcción política más importante, un mundo cambiante de ficción).
Donde luego introduce el concepto del feminismo, partiendo por decir que los movimientos feministas han ido armando el camino y creando la experiencia de la mujer.
Aquí hay una crítica al orden del texto, o a la manera en que está dispuesto, ya que una vez que se introduce el tema del feminismo, se retoma el tema de los cyborgs, pero sin hacer ningún tipo de relación entre ambos tema, por lo que en un principio el texto sólo genera confusiones, donde además hay que tener en cuenta que la autora se inspiró en el manifiesto comunista para poder escribir este manifiesto Cyborg, en donde se combina la complicado estructuración del texto, con un lenguaje más poético que nada, se dificulta aún más el posible entendimiento del texto.
Para luego empezar de lleno con el tema del feminismo socialista, llevándolo al plano del marxismo y a una eventual comparación, llevando a las mujeres a ser tratadas como el pueblo oprimido, donde se analizan los actos que han tenido las mujeres a través del tiempo, pero al mismo tiempo se estudian las diferencias de los feminismos con lo que hablaba Marx, ya que por ejemplo, MacKinnon decía que el feminismo adoptaba una estrategia analítica diferente del marxismo, fijándose primero, no en la estructura de clases, sino que en la notoria diferencia entre sexo/género y su relación generativa, además de la constitución de los hombres y la apropiación sexual de las mujeres en ciertos temas, con lo que se llega a decir que las mujeres no existe como individuo o sujeto, o sea que ni siquiera se las toma como alienadas con su producto (como era el caso de Marx), ya que no posee su existencia como mujer para la apropiación sexual1
Y como se ve posteriormente en el texto, se sigue ahondando en el tema de la represión femenina y su posterior surgimiento, pero no hay ningún tipo de hilo conector que una las dos ideas presentadas en este capítulo por la autora, ya que luego no se retoma el concepto de cyborg como tal, a no ser que Haraway se refiera a las mujeres como cyborgs, los cuales son mitad organismo y mitad máquina, ya que al principio y en un momento de su historia éstas se encuentran en cierto tipo a disposición de los hombres, quiénes se podría considerar que las reprimen, pero decir eso, sería nada más que crear una conexión, por lo que la autora deja en este manifiesto algunos temas inconexos, a no ser que haya que leer los capítulos previos para poder entender a qué es lo que quiere llegar con este manifiesto.

Comentario Silvana Suerez

Latour parte de la base que el hecho científico es un proceso de creación. Produciendo se una construcción del hecho durante el trabajo concreto del laboratorio, así tiene una forma ya construida. Para esto existe todo una seguidillas de pasos a seguir; un proceso de convencimiento de los participantes a través de una contundente argumentación.
El proceso de hecho científico, se va configurando socialmente, mediante alianzas o negociaciones, durante la construcción de orden los científicos realizan inscripciones que llevan al producto final, que es el trabajo en el mismo laboratorio.
Latour describe los trabajos de Pasteur en siglo XIX, intentando explicar la mistificación de la ciencia, la cual deriva de la idea de los científicos que son capaces de realizar predicciones. Pero el punto principal y fundamental que plantea es el problema de cómo los hecho científicos, se reproducen en los laboratorios. La piedra de tope, es que esté se encuentra frente a una creencia y no una prueba. Por tanto las supuestas predicciones de los científicos sólo se reproducen dentro de las paredes de un laboratorio y no en una extensión más allá de ellas.
Otro punto fundamental es que en el texto todos los casos provienen de contextos sociales diferentes, por tanto, Latour no se percata de que el contexto social es importante pero también lo es, que los resultados de las exploraciones científicas se condicionen a la realidad. Está claro que los trabajos científicos poseen un componente social importante para su desarrollo, pero igual lo es resistir a la contrastación con la realidad.

lunes, 24 de noviembre de 2008

Comentario Roberto Cantillán

Callon y Latour nos proponen una metodología interdisciplinaria para el estudio de lo social y la comprensión del desarrollo tecnológico. Los dos autores consideran que las innovaciones dependen de un todo orgánico que se va transformando a medida que se transmiten las “declaraciones” que generan las redes sociales.
Partiré comentando la propuesta de Callon en su texto “el proceso de construcción de la sociedad. El estudio de la tecnología como herramienta para el análisis sociológico”; en este texto Callon pretende llevar a cabo una nueva interpretación de la dinámica tecnológica y detalla el trabajo de los ingenieros-sociólogos, como él los denomina, en un contexto especifico en el que se presenta y se intenta desarrollar una gran innovación, el coche eléctrico.
Los ingenieros-sociólogos que participaron en la presentación de esta gran innovación poseían un gran conocimiento de técnicas para el desarrollo de una historia social y tecnológica definida.
Para la presentación de esta proyecto los ingenieros sociólogos hicieron uso de técnicas que se asocian al trabajo de los científicos sociales, ya que intentaron construir y comprender a cabalidad del mundo en el que se desarrollaría su innovación; así sus estudios los llevaron por los ámbitos de la economía, de la física, de la ciencia política, de la sociología, de las matemáticas, etc., rememorando de alguna manera a sus precedo res del renacimiento.
Por esta gran capacidad elogiada por Callon, este se pregunta si acaso ¿no podrían las ciencias sociales, de una manera u otra, hacer uso de las sorprendentes facultades de los ingenieros poseen para concebir y probar los análisis sociológicos, al mismo tiempo que desarrollan sus habilidades técnicas?
(Se presupone entonces que se puede comparar el trabajo de la ingeniería con el trabajo de la sociología profesional)
En la presentación de la gran innovación se genera una pugna por dos partes que intentan imponer sus intereses, por un lado los ingenieros de edf y por otro los ingenieros de Renault, estos basaron sus estudios en los trabajos realizados por dos connotados sociólogos franceses, uno es Touraine y el otro es Bourdieu
La sociología de Touraine enfatiza en la importancia que tiene el conflicto de clases en el funcionamiento de la sociedad y en la producción de su historia, en este sentido Touraine cree que el conflicto central esta entre los tecnócratas y los consumidores. la sociología de Bourdieu no reduce el conflicto a dos clases si no que habla de una multiplicidad de esferas que mantiene relaciones y buscan imponer su poder, la unificación de la sociedad se daría y organizaría en torno a un modelo cultural dominante, el de las clases altas.
Los dos análisis se fundamentaron en el uso de estas dos teorías además de una multiplicidad de técnicas de otros campos.
Callon al igual que Latour habla del actor red y su papel fundamental en la cohesión social y la resultante dominación. Un actor red es, simultáneamente, un actor cuya actividad consiste en entrelazar elementos heterogéneos y una red que es capaz de redefinir y transformar aquello de lo que esta hecha (callón 1981, p 157)
Por su Parte bruno Latour cree que para entender el problema de la dominación debemos alejarnos de la concepción de las relaciones sociales como algo que concierne solo a actores humanos, sino que también tendrían un papel fundamental actores no humanos en el desarrollo de la posibilidad de mantener unidad a la sociedad como totalidad duradera.
Para ejemplificar esto Latour utiliza primero las declaraciones hechas por un dueño de un hotel que busca lograr tener una baja perdida de llaves generando una conciencia en sus clientes al bombardearlos con declaraciones de tipo simbólico que van influyendo en el actuar de los individuos hasta lograr que la mayoría de sus cliente si deje las llaves en conserjería antes de salir. Latour nos dice que las fuerza de una declaración depende en parte de lo que, como primera medida se comunica, y segundo lo que el actor que recibe el mensaje hace con el. Por lo tanto el destino de una declaración estaría en manos de los otros.
Utiliza también la historia de la cámara Kodak para ejemplificar la discontinuidad y desemejanza de las transformaciones ocurridas. Los factores que juegan para variar Una realidad no pesarían por su esencia sino por sus sintagmas que pueden ir Variando continuamente en cada historia. Por lo tanto lo que se necesita para mantener para mantener una realidad es continuar la extensión del sintagma. En Este sintagma descansa la realidad y también donde se generarían repesque varían según los actores que influyen y son parte de esta. En este sentido la dominación no es un capital, sino que debe ser mantenida, reparada, desplegada, etc., la dominación seria un efecto no una causa.
El número y velocidad de los acontecimientos depende por entero de movimientos de alianza y rupturas ejecutadas por los actores, por lo tanto si reconstruyen esos movimientos, es posible también obtener la dimensión de temporalidad, en este sentido la continuidad no es algo drástico, ya que el tiempo como cualquier cosa debe ser construido, no nos es dado. Latour plantea que si se olvida la división entre infraestructura y supra estructura es posible obtener un mayor relativismo y por lo tanto la heterogeneidad de las redes quedaría garantizada

viernes, 21 de noviembre de 2008

Comentario Daniel Espinoza

Tanto Bruno Latour como Michel Callon nos proponen nuevas formas de acercarnos a hechos sociales relevantes para la sociología contemporánea. Latour mediante su sociología de la traducción, nos propone una especie de “etnografía” del laboratorio de Pasteur, y como es posible que los sistemas micro (en su mundo del laboratorio) puedan ser recodificados y llevados al mundo macro. Callon por su parte, mediante su análisis sobre la explotación de las vieiras en los puertos de Francia busca demostrar como se forman nuevas relaciones sociales por medio de los principios otorgados por el conocimiento científico.
En este punto, creo que es necesario señalar que las sociologías que proponen ambos autores tiene un carácter interdisciplinario, por lo que los aportes de otras ciencias serán indispensables para una comprensión más amplia y clara de los sistemas estudiados.
Latour nos otorga los pasos seguidos por Pasteur para poder llevar a cabo sus pretensiones científicas, entre estos destacan:
Atraer el interés de la ciudadanía: Esto lo logra llevando su laboratorio a la granja, captando su interés en el problema social más preponderante de su época, la enfermedad del Ántrax.
Apoyar la posición número 1 en una posición más fuerte: Una vez conseguido un bacilo cultivado, Pasteur se dirige a su laboratorio para hacer una traducción más fiel de los efectos y causas de la enfermedad. “El resultado es que los laboratorios pueden ahora imitar la variación de la virulencia” (1)
Mover y modificar el mundo con la investigación resultante: Pasteur tuvo que pasar del mundo de la microescala a la macroescala y para ello fue necesario una traducción que es entendida comunitariamente como un contrato.
Así, la vacuna artificial creada por Pasteur pasa a transformarse en un nuevo elemento simbólico capaz de generar relaciones sociales entre diferentes grupos, todos estos unidos bajo la confianza del conocimiento experto y/o científico.
Callon nos señala que a pesar de que los actores se vieron involucrados en numerosas incertidumbres “trabajaron incesantemente sobre la sociedad y la naturaleza, definiendo y asociando entidades, para forjar alianzas que solo se confirmaron estables en un lugar y durante un tiempo” (2). Aquí, el conocimiento científico también es crucial para la traducción y resolución del problema tratado. En este caso, la traducción debe ser entendida como un proceso constituido por diversos actores y sistemas.
(1) Latour, B. - Dadme un laboratorio y levantare el mundo.
(2) Callon, M. – Algunos elementos para la sociología de la traducción: la domesticación de las vieiras y los pescadores de la Bahía St. Brieuc.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Reseña Valentina García

Latour, en la introducción del libro, parte haciendo una primera problematización del concepto de “social”, cuando este empieza a tener una significación material. A partir de esto se puede decir que hay dos tipos de significación: el primero es un movimiento en un proceso ensamblado (Latour, 2005, pag. 13) y el segundo es que es algo diferente a cualquier otro material. El autor critica tajantemente este último, y se propone hacer una redefinición de que es lo social a su punto más tradicional y más olvidado por los sociólogos. Pero para esto se debe saber la etimología de Sociología, la que sería “la ciencia de lo social”, pero está en un problema ya que las palabras “ciencia” y “social” han tenido una fuerte transformación por el avance tecnológico, y puesto que la definición de sociedad también es radicalmente transformada por las nuevas conexiones que existen entre actores, aquellas relaciones que ya no pueden ser llamadas simplemente como sociales. Por lo tanto, estas dos palabras han ido cambiando su significado, dejando una importante estabilidad para componer la palabra sociología. Por esto el autor también hace una redefinición de la sociología, la que la compara con un primer enfoque, el que luego es catalogado como “sociología de lo social”, y conjuntamente, la redefinición es llamada “sociología de las asociaciones”. La primera se basa principalmente en que lo social puede explicar a lo social y también explicar todo aquello de otros dominios que no sean sociales, a partir de factores sociales que explican aspectos sociales de cosas no sociales. Por lo tanto lo social puede explicar disciplinas como la del derecho, de la economía, etc. Y por otro lado, la sociología de las asociaciones apunta a un carácter de lo social como un rastreo de asociaciones... un tipo de relación entre cosas que no son sociales en sí mismas (Latour, 2005, pag. 19), como un movimiento muy peculiar de reasociación y reensamblado (Latour, 2005, pag. 21). Este enfoque deja claro que no existe nada detrás de cualquier disciplina, en las que pueden que produzcan sociedad como no. Y las conexiones de las sociedades están en constante movimiento, por la que dejan su carácter estable. Este enfoque tiene un nombre histórico, el que es muy criticado por el autor, pero que se resigna a ocuparlo para todo el trabajo. Este es el nombre de TAR, el que significa teoría del actor-red. Esta disciplina toma su principal ajuste desde la compatibilidad que existe entre objeto con lo social. El rol del no-humano es del actor, por lo tanto, este enfoque trata de entender las relaciones que pueden existir entre no-humanos y todo lo que estos influyen en los procesos sociales que tanto recurren los sociólogos de lo social. Es por esto que, cuando las situaciones que son inciertas rompen con los límites que abarcan las teorías de la sociología de lo social para explicar nuevas asociaciones, es que se acude a la sociología de las asociaciones, ya que esta tiene un plano en el que los objetos son también actores sociales y capaces de hacer y reproducir acciones al igual que los humanos para la sociología de lo social, por lo tanto, al actor social humano se le restituye su carácter de informante. Así mismo la TAR nos plantea que hay que seguir cada innovación que tiene el actor.
No obstante, aunque existan muchas diferencias entre un enfoque y otro, existe una reconciliación de estos dos a partir de que el segundo es una corrección de aquello que el primero cumplió fugazmente.
A partir del capitulo “Tercera fuente de incertidumbre: los objetos también tienen capacidad de agencia” es que Latour nos indica que los sociólogos de lo social tienen una confusión entre la causa y el efecto, y para esto quiere explicar las asimetrías que ocurren en cualquier sociedad. La TAR propone que lo social debe ser explicado, criticando aquellas teorías sociales en las que se decía justamente que lo social explicaba a lo social, refutándolo en que lo social por si solo no explica nada. Por lo tanto, la asociación temporal de lo social, que es de un ensamble colectivo, tiene una corta y fugaz duración de sus conexiones, que produce un cierto caos, y aquí entra la dominación y el poder en la sociología.
Latour habla sobre los objetos, los cuales deben estar en las conexiones entre no humanos y humanos, y no es que su principal rol sea el de que los objetos se explican por sí mismos, sino que son los objetos los que deben asociarse a estas conexiones, por su carácter de acción, para poder así entender aquellos sucesos que no se pueden explicar con teorías de lo social. Es así que, para finalizar, Latour aclara que es imposible realizar un colectivo si es que no existe una limitación entre el mundo de lo social y el mundo de lo material.

Comentario 3 Francisco Sastre

Sin duda el nuevo juego a traducir por parte de Bruno Latour y Michael Callon sobre las incorporaciones al análisis sociológico son bien interpretadas por la reseña y explicadas claramente en el texto. La sumisión al papel del humano en todos los análisis, marca un hincapié a la incorporación para temas como la dominación de poder y evolución social la noción de los no-humanos y el estudio de la tecnología.
Para Callon toma de ejemplo a los ingenieros sociológicos que fueron planteados en la reseña también a la introducción del coche eléctrico en Francia. Las técnicas realizadas, la búsqueda de su universo social, pues recalca la sociedad como consumidores post-industriales, lo cual denota un análisis sociológico que es inculcado a través de la tecnología como factores transformadores del mundo externo. Por lo tanto la interrogante de que a las Ciencias Sociales se integre el uso del análisis de los ingenieros para concebir un análisis total, incluyendo habilidades y técnicas es lo introducido por los autores. Para esto la noción de actor-red es fundamental, donde el actor humano como no-humano son el producto de una serie de redes que lo tienen como resultado a éste. Son mezclas y asociaciones de elementos heterogéneos cuyas identidades y relaciones mutuas son el juego, todos elementos son parte de una cadena.
Para Latour también intenta explicar a través de los actantes no-humanos y contexto tecnológicos las relaciones de poder provocadas exclusivamente por lo social. Los elementos claves se encuentran en la reseña de mi compañero, como la relativización que se provoca a la realidad con los objetos no-humanos que dan un nuevo orden al llamado tejido social, donde los individuos pasan a ser uno en las herramientas, en la cual el trabajo con la tecnología influye en todos. Y que la principal característica del texto referido el resultado de acciones humanas como las no-humanas son parte de un todo que tiene un antes y un después, pero que deben ser concebidas por el momento y lugar donde fueron desarrolladas.
Sin embargo a la reseña colocaría elementos ejemplificadores como la conformación al llegar a esos análisis, del uso de la tecnología, como desarrollar las técnicas del diagrama la cual cae en la elección entre incorporación y excorporación de las cargas para llegar a la declaración de tal acto. Como también elementos que se dan al actor-red para su asociación de electos heterogéneos, como la noción simplificación de éste, como también la manera de las controversias para poder reconocer a los elementos asociados y las yuxtaposiciones que definen las condiciones de operación para als construcciones que se darán por el análisis de los ingenieros.
En conclusión la reseña se enmarca el lo general de ambos autores por llevar la integración de aspectos tecnológicos, no-humanos al análisis sociológico, pues todos somos parte de las cadenas de actores-red que afectan e influyen al conocimiento de nuestro mundo social.

lunes, 17 de noviembre de 2008

Comentario crítico Claudio Silva

En ambos textos podemos encontrar un intento por desarrollar una sociología de la traducción. Esta debe darse con el fin de derrumbar las diferencias existentes entre laboratorios y el medio social en ele se encuentran situados, significa llevar los estudios micros que ocurren en los laboratorios a una realidad macro. Esto se logra mediante la traducción de lo realizado en el laboratorio a un lenguaje más comprensible por todos y que enrole y aliste a los miembros de la sociedad en general con el objetivo de compartir las mismas expectativas de un proyecto definido.
Para Latour “Aquel que es capaz de traducir los intereses de los demás a su propio lenguaje lleva las de ganar”.[1] Para ambos autores romper las barreras del lenguaje científico y trasladarlas a un lenguaje más común hace posible que la ciencia se convierta en un instrumento para generar cambios sociales.
El enfoque propuesto por ambos autores, me parece bastante útil a la hora de construir “puentes” para que la ciencia realmente tenga un impacto en la vida cotidiana de los individuos, ya que sin la debida traducción del lenguaje técnico de los experimentos realizados en los laboratorios, todo el trabajo realizado en estos no pasaría mas allá de una simple curiosidad y podrían desperdiciarse investigaciones que eventualmente pueden llegar a causar impactos en comunidades asociativas, como es el caso de la comunidad de pescadores nombrada en el texto de Michel Callon.
Otro elemento que encuentro necesario destacar es la insistencia de ambos autores a traspasar la frontera de “microescala” y “macroescala”, esto quiere decir, que para que un trabajo científico tenga peso e influencia a un nivel social, se hace necesario que este traspase las barreras que supone un laboratorio y aplique su conocimiento a niveles “macros”, es decir, afuera de la circunscripción del laboratorio. Como lo señala Latour acerca de la vacuna creada por Pasteur. “Para que la vacuna sea efectiva, tiene que extenderse fuera, en el mundo real de ahí fuera, como dice la gente. Esta es la mejor muestra de lo absurdo de la dicotomía dentro/fuera y de la utilidad de los microestudios de la ciencia para comprender macroproblemas”. [ 2]
De esta manera se hace necesario vislumbrar que la sociología de la ciencia debe dar un paso adelante, como lo plantea Latour, y comprender que el contexto social y el contexto de los laboratorios no funcionan totalmente separados. No hay un “dentro” del laboratorio y un “fuera” del laboratorio, sino mas bien se deben estudiar ambos contextos como uno solo, ya que en palabras del autor “En los estudios de laboratorio, no solo se encontrara la clave para comprensión sociológica de la ciencia, sino también, creo, la clave para una comprensión sociológica de la sociedad misma, porque es en los laboratorios donde se genera la mayor parte de las nuevas fuentes de poder” [3].







[1]Latour, B. – Dadme un laboratorio y levantare el mundo. http://www.oei.es/salactsi/latour.htm.
[2]Latour, B. – Dadme un laboratorio y levantare el mundo. http://www.oei.es/salactsi/latour.htm
[3].Latour, B. – Dadme un laboratorio y levantare el mundo. http://www.oei.es/salactsi/latour.htm

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Reseña Francisco Pichot

Las ciencias sociales y en especial la sociología, históricamente, han dado gran relevancia al actuar del individuo por sobre todos los demás sucesos del mundo social. Esto se ve plasmado tanto en la obra de Parsons como en la de Habermas, quienes aun y cuando rescatan la existencia de un lenguaje simbólico que influye en la acción individual, siguen depositando la importancia de la acción en “lo humano”.
Bruno Latour lleva esta discusión a un nuevo nivel integrando a la comprensión de la dominación y de las relaciones sociales actores no-humanos, siendo estos el resultado de la acción humana directa o indirecta, y que su actuar se enfoca en el bienestar o la simplificación de las labores para los humanos. Para Latour, todos los actores no-humanos son el producto de una trayectoria a-temporal originada en la innovación de ideas pre-existentes, esto lo ejemplifica el autor con el caso de la cámara fotográfica Kodak, la cual se genero sobre la base de la innovación de las placas fotográficas pre-existentes y el perfeccionamiento de la cámara fotográfica en si. Proceso en el que un grupo reducido de personas con conocimientos técnicos específicos intervienen para el beneficio de un grupo mayoritario de la sociedad, de este modo actores no-humanos intervienen en el tejido social y le da nuevas direcciones.
Así, los humanos relativizan la realidad al crear objetos no humanos que son posibles de movilizar y que brindan un nuevo orden al tejido social, aportando a la labor humana. Pero estos actores no-humanos ya no son solo locales, sino que son globales y a-temporales, ya que son comprendidos por todos como herramientas para satisfacer la labor humana. Del mismo modo pierden a ojos del individuo su multiplicidad y se convierten en solo una herramienta, así una cámara fotográfica se desprende de su proceso de fabricación en las manos de una persona y se convierte en una herramienta que altera el actuar del individuo y el entramado de la sociedad. La tecnología que el ser humano es capaz de generar ya no es tecnología aparte del accionar humano, sino que se integra en este y lo altera de modo decisivo. Pero simultáneamente pierde sus características originarias y se vuelve un ente similar al humano, ya que tiene una capacidad de ser reconocido como ente de cambio a nivel global.
Así Latour presenta su tesis principal, donde propone integrar al análisis sociológico de los hechos sociales ya no solo el actuar de los individuos, sino también el actuar de los objetos no-humanos, elementos todos resultantes de la innovación de los humanos a través de la historia y producto de trabajos a-temporales por parte de personas especializadas en los temas y a partir de conocimientos y materias pre-existentes, que se adaptan a las nuevas demandas de los individuos modernos. Ya no somos solo el resultado de acciones humanas, sino también el resultado de acciones no-humanas que al igual que las acciones desarrolladas por individuos, son parte de un todo que tiene un antes y un después, pero que deben ser concebidas por el momento y lugar donde fueron desarrolladas. Así, para Latour, “la “descripción” de las redes socio-técnicas frecuentemente se opone a su “explicación””[1] ya que la descripción ve solo aquello que es presente y no integra el devenir de los objetos no-humanos presentes en esa red. El actor tanto humano como no humano, ya no es en si mismo un agente de cambio, sino el resultado de una red de sucesos que influyen en su comprensión social y en su aplicación social igualmente.
Será en este punto donde Michel Callon introducirá su interés por integrar la tecnología al estudio sociológico, ya que para el la tecnología es transformadora de nuestro mundo externo. Para ello integra a sus postulados el ejemplo de un grupo de ingenieros-sociólogos franceses que integran a la creación de un vehiculo eléctrico tanto el devenir social del país, como los avances tecnológicos que se darán en el tiempo. Mezclando, desde la mirada de Callon, elementos tremendamente disímiles como las demandas sociales por medios de transporte mas ecológicos, con los principios electroquímicos del zinc. Es así que Callon plantea como tesis central que la tecnología debe ser integrada al análisis sociológico, porque de manera indirecta o directa esta profundamente vinculada con el devenir social, ya que concibe la idea del “Actor-Red”, donde tanto el actor humano como no-humano son el producto de una serie de redes que lo tienen como resultado. Es así que el vehiculo eléctrico para Callon es el resultado de una red donde interactúan tanto avances fisicoquímicos inertes con las demandas ecológicas de la población y la búsqueda del ministerio Frances del medioambiente de un medio sustentable de transporte que simultáneamente proteja el ambiente. Esto produce que una serie de actores se vincules aun y cuando sean tremendamente disímiles, en la búsqueda de un cambio en la sociedad para el beneficio de todos.
Con esto, tanto para Callon como para Latour, debemos ser capaces de integrar elementos heterogéneos al análisis de la realidad social, ya que nos encontramos en una era post-industrial donde se da una relación de dominio al mas puro estilo de Touraine, ya que como plasma Callon, “Por un lado existe grandes intereses (enormes corporaciones) que orientan la investigación y por el otro lado encontramos al consumidor, cuyas necesidades son manejadas por los tecnócratas que manejan los grandes intereses”[2], esto enmarca la relación de dominación en posiciones dominador-dominado, que ya no solo deben ser comprendidas en su aspecto meramente humano, sino también en las componentes tecnológicas no-humanas que alteran el quehacer humano y lo facilitan o lo restringen, gracias a las relaciones de poder preponderantes en la sociedad.
De este modo, tanto para Callon como para Latour, la sociología debe ser capaz de actualizar su visión de la sociedad e integrar a ella los aspectos no-humanos que la influyen, ya que todos somos “Actores-Red”, al ser el resultado de una red de sucesos que nos afectan y determinan nuestra forma de actuar y razonar. Especialmente al ser consientes que en esa red de situaciones de las que somos resultados, no solo influyeron humanos, sino también no-humanos.
[1] Latour, B. "La tecnología es la sociedad hecha para que dure". Pag. 139. Domènech, M. & Tirado, F. (eds.). Sociología Simétrica. Barcelona: Gedisa
[2] Callon, M. "El proceso de construcción de la Sociedad. El estudio de la tecnología como herramientas para el análisis sociológico”. Pag. 149 Domènech, M. & Tirado, F. (eds.). Sociología Simétrica. Barcelona: Gedisa

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Cometario Vanessa Orrego

La tesis de Butler acerca del género, el sexo y la sexualidad como actos preformativos resulta intrínsecamente llamativa, precisamente porque el documento explicita la deconstrucción de la diferencia entre naturaleza y cultura, a partir de un discurso posestructuralista que rescata el carácter falocéntrico de la misma diferencia como premisa, la heterosexualidad como un hecho político, y el papel articulador y preformativo de la acción (reiterada) como construcción y reproducción de las formas socio-culturales e históricas.
Sin embargo, aún a costa de la apertura crítica que ofrece para mirar incluso la diferencia entre las ciencias naturales e interpretativas discutidas al interior de la sociología, me parece que en el texto “El género en disputa” se encuentra presente una suerte de olvido y/o silencio. Es así como propongo que, mientras Bulter desarrolla su tesis sobre la dominación “naturalista” que recae sobre el género, el sexo y la sexualidad; se presenta un movimiento que tiende a exhibir como principal (e incluso único) artífice de la misma al hombre, ya sea en su forma particular o general.
El capitulo mismo abre con una pequeña presentación de la teoría lacaniana, y aún cuando ello se hace especialmente para mostrar las incongruencias que nuestra la tesis de Kristeva, me parece que este mismo movimiento muestra una cierta complacencia de la autora con el psicoanálisis. Bulter no crítica la imagen del Padre castrador como fuente inaugural de la sociedad, del lenguaje y ser humano; aún cuando puede perfectamente hacerlo pues ella misma ofrece una reseña de la teoría para degustación del lector, contrariamente pareciera preferir dedicar tiempo al análisis de la obra de Kristeva, quien no habría sabido realizar una apropiación crítica de Lacan. Pero, ¿y ella?. ¿Cuál es su opinión acerca del “malestar en la cultura”, como fue definido por Freud?. Estando implícito su oposición al estructuralismo francés, éste parece emerger más bien, dentro de esta lógica, como un ataque a su extremo universalismo esencialista; y no directamente con su contenido, no por lo menos cuando éste historiza.
En el texto quedan, entonces, un conjunto de interrogantes por responder. ¿Cuál es el papel que tiene la mujer en la naturalización de los discursos sobre el género, sexo y sexualidad?. Si dejamos de lado toda consideración de la misma como un ser pasivo, tal y como Butler formula en el libro, ¿no es, entonces, necesario clarificar el rol que ella cumple en los procesos sociales de naturalización y dominación?. Mientras el papel subversivo del feminismo emerge cada ciertos tramos en la narración de la autora, el rol que tienen las mujeres en el origen mismo y la reproducción del orden social queda en silencio y olvido, y el hombre surge como el principal (sino el único) artífice.
Al respecto, me parece, por ejemplo, interesante la propuesta que Bourdieau ofrece acerca de la dominación masculina, en la cual, según él explica, la mujer juega un importante rol en la medida que como ofrece su sumisión como subordinada y reproduce las formas sociales. Por otro lado, creo que hubiese sido interesante conocer la mirada crítica al psicoanálisis que Butler reconoce en falta cuando refiere a Kristeva, con especial consideración de la lectura que Erick Fromm desarrolló del Complejo de Edipo y el análisis que Lacan hace de la dinámica del amo y el esclavo (independiente de su anclaje en una de las estructuras clínicas), haciendo con ello un posible vinculación con el mismo Bourdeau. De ambas maneras, me parece que el “olvido” del papel que tiene la mujer en el origen y mantención de status quo, no sólo deja de ser tal, sino también implica una vuelta crítica a sus propias propuestas donde lo subversivo adquiere otros matices.

martes, 4 de noviembre de 2008

Comentario Roberto Cantillán

“Modernidad y ambivalencia” (Zigmunt Bauman).
En el capitulo leído Bauman se refiere a la ambivalencia, como “la posibilidad de referir un objeto o suceso a mas de una categoría”.
Sin duda el lenguaje irrumpe como necesidad ante el caos de la naturaleza y la necesidad de esquematizar e integrar a nuestra lógica esta naturaleza incontrolable y salvaje.
El origen de nuestro conocimiento que pretende falazmente conocer la verdad, nace de las intrínsecas relaciones de poder que manifiestamente se ponen en juego en la naturaleza misma, y las convenciones y arbitrariedades que surgen de este lenguaje necesario ante la necesidad de preservación, ante la necesidad de vivir en sociedad.
Las verdades que dominan el mundo y conocimiento son las que legitiman el lenguaje mismo de una sociedad determinada y las que dominan a la otras, en este sentido y ante la constante inseguridad nuestro lenguaje, que es el que condiciona nuestra interacción y comprensión del entorno es casi siempre vulgar, ya que la necesidad de comunicación es urgente, y tendemos a reducir nuestra cotidianidad y cultura, haciendo de la diversidad y diferencia, tan humana como natural, algo muy lejano en la actual modernidad y su cosmovisión del mundo.
(Este análisis puedo hacerlo luego de leer el capitulo de Bauman y comprarlo con lecturas que generalmente pueden ser llamadas postmodernas. Me pareció acertado hacerlo para también tratar de asociar el análisis de bauman y las críticas a la modernidad).
La clasificación que se intenta hacer por medio del lenguaje para la comprensión de nuestro espacio natural, según bauman, tiene la finalidad de prevenir la ambivalencia.
La modernidad en este sentido puede intentar reducir la ambivalencia, solo reducirla, ya que la ambivalencia es algo que se da en el intento mismo de reducir la diferencia, de reducir el caos que nos rodea, a categorías, por medio del lenguaje,
La modernidad y el lenguaje son la expresión misma de la necesidad de orden, de comunicación, de seguridad, de confianza y expectativas, ya que nuestro vida transcurre linealmente, con miradas hacían el pasado y el futuro, se vive en la mentira, mentiras que nacen de metáforas por las que conocemos la realidad, y en base esa lógica de conocimiento se nos olvida el presente, la inmediatez, la experiencia, y eso mismo es lo que hace la tecnología en al modernidad, ya que su fin es privarnos de la experiencia, de la sensación., en resumen cosificar el mundo.
Siguiendo lo anterior el orden mismo y la ambivalencia, así como la mentira y la verdad, tienen un mismo origen, el interés que hay detrás. En este sentido el interés que hay detrás de la modernidad de combatir el caos es la genera la misma ambivalencia, al sustentarse su validez en convenciones y arbitrariedades.
Los problemas hermenéuticos nacen de la misma ambivalencia, los conflictos territoriales por ejemplo son producto del poco entendimiento entre las personas; (la confusión), de la vulgar y sencilla comprensión que tenemos unos de otros, de la casi nula empatia que tienen por ejemplo las culturas “oficiales” de las diferencias que nos caracterizan.
En este sentido la ambivalencia y el orden. El miedo al caos y la cosificación del mundo para hacer de este un mundo reducido y unido, son productos de la misma modernidad, del miedo al caos y a la naturaleza, se podría decir de las mismas predisposiciones naturales de nuestra existencia.

martes, 28 de octubre de 2008

Comentario Francisco Silva

Como se señalo en la reseña, el autor distingue tres etapas de cambio en lo social, que van desde la tradición a la modernidad reflexiva, pasando por la modernidad simple. Para que se cumpla este proceso existe según el autor un motor social, el cual es el proceso de individualización que tienen los sujetos al separarse de las estructuras sociales, tales como, la familia, la iglesia etc. De este modo para alcanzar una modernidad reflexiva se hace necesario una crisis de las estructuras colectivas, en palabras del autor “la modernidad reflexiva se alcanza solo con la crisis de la familia nuclear y la autoorganización concomitante de las narraciones vitales; con la perdida de influencia de las estructuras de clase sobre los agentes”.
Sin embargo en uno de los ejemplos económicos entregados por el autor como es el caso de Alemania, en donde se da un proceso de reflexividad alto en torno a la producción, pero que sin embargo va de la mano con un fuerte lazo comunitario. Este lazo comunitario se expresa en la presencia de sindicatos de trabajadores cualificados que favorecen el flujo constante de información dentro del ámbito de la producción, lo que tiene como consecuencia directa un acceso equitativo a la información mediante las comunidades de iguales dentro de la empresa (sindicatos). Es así como el propio autor nos entrega un claro ejemplo de cómo se pueden mantener lazos comunitarios dentro de la producción, como los sindicatos, sin empobrecer estos el correcto desarrollo de una modernidad reflexiva que integre a todos los individuos. Este ejemplo puede ir en contra de la tesis de que para alcanzar una modernidad reflexiva se de el supuesto de la individualización de los sujetos en todo ámbito social.
De la misma manera se puede señalar otro ejemplo mencionado por el autor, los llamados “perdedores de la reflexividad”, quienes han sido degradados al nivel de quedar de todo flujo de información y comunicación. Si estos sujetos forman parte de una comunidad existe la opción de tener un acceso a los medios de información y comunicación que son necesarios según el autor para lograr integrarse a la fuerza laboral con igualdad de oportunidades.

miércoles, 22 de octubre de 2008

Reseña Javier Bustos

El autor parte esquematizando el texto en 3 partes, la primera es sobre el poder que tienen los actores en su agencia sobre las estructuras que los condicionan, la segunda es sobre el paso que se da entre la dimensión cognitiva a la estética, y por ultimo la importancia de pasar de la dimensión estética a una visión más hermenéutica sobre el concepto de comunidad. Estas tres son parte de la llamada teoría de la modernidad reflexiva.
A continuación se pasara a desarrollar en extensión cada uno de los 3 puntos mencionados.
a) Se parte por una división en tres aspectos de lo que es el cambio social, la primera etapa es de la tradición a la modernidad (simple) y de esta a la modernidad reflexiva.
Lo distintivo de la última fase es lo correspondiente a la reflexividad, la que presenta dos definiciones, una que se base en la reflexividad estructural, y la otra que se centra en la autoreflexividad, estas se distinguen entre si debido a que en la primera la agencia ya liberada de las estructuras piensa sobre las condiciones que permiten su propio funcionar, mientras que en la segunda el control que se produce desde el exterior se reemplaza por un autocontrol.
Como uno de los ejes de la teoría de la modernidad reflexiva se encuentra la freisezung o como dice Lash “o progresiva liberación de la agencia de la estructura”1. Esto se puede encontrar empíricamente en la esfera económica, en donde los trabajadores se ven sometidos a no ya un control externo si no a un auto-control, esto se debe a que se produce una mayor cantidad de conocimientos que se necesita manejar. Pero se puede ver que existen considerables diferencias entre distintos ámbitos laborales, lo que lleva al autor a proponer el concepto de condiciones estructurales para la reflexividad, las que se sustentan en estructuras no-sociales que son las redes globales y estructuras de información y comunicación. Esto se traduce en que el la modernidad simple las oportunidades de vida se basaba en lo referente a los capitales productivos, y ahora en la modernidad reflexiva se centran en el acceso y el lugar que se puede ocupar en las estructuras de información y comunicación. Para ejemplificar el autor compara los casos de USA y Japón, en el primero se da un reflexividad producida por el mercado, mientras que en el segundo se da un gobierno más participativo y cooperador de las estructuras de información. Otra arista es el surgimiento de una nueva clase media que se asocia a las estructuras de comunicación e información y por otro lado una subclase que esta desligada de estas estructuras, que seria la clase baja.
b) Lo importante en esta parte es lo referente a la reflexividad estética y su mediación ya no conceptual si no mimética. Esta postura mimética la adopta de la tradición de Nietzsche y de Adorno principalmente debido a que los este ultimo pensador concibe un proceso de mediación mucho más proximal que abstracta y también porque la reflexividad es para Lash implícitamente Hegeliana, lo que para sus efectos Adorno se podría considerar como un Hegeliano. A los filósofos que defienden esta postura se les denomina filósofos de la alegoría y es a estos los que les falta una noción de comunidad o de nosotros, la que se va a encontrar en la tercera parte del libro.
c) Esta parte se centra fundamentalmente en entender el concepto de comunidad y desde donde encontrar una visión que lo explique. Para poder encontrar el concepto de nosotros o de comunidad se tiene que “No debemos deconstruir, si no interpretar hermenéuticamente, y evitar de este modo las categorías de agencia y estructura, de sujeto y objeto, de control frente a la contingencia y de lo conceptual frente a lo mimético”2. Uno de estos intentos teóricos lo produjo Jurgen Habermas al intentar con su teoría de la acción comunicativa y también en el ambiente de los estudios culturales. Pero él que mejor llega a comprender el concepto de comunidad es Bourdieu quien “habla de reflexividad en términos del desvelamiento sistemático de las categorías no pensadas que son precondiciones de nuestras prácticas más concientes”3, esto se interpreta de la siguiente manera, lo que Bourdieu nos dice con esta cita es que se debe entender a la luz de un nueva relación hermenéutica, ya que esas categorías no pensadas se tienen que entender a la luz de los fundamentos ontológicos de la conciencia. El otro gran aporte de Bourdieu es que presenta el concepto de habitus en una forma menos rígida que la que presentan las categorías, o sea al presenta al habitus como un esquema permite llevarlo a una redefinición en términos de “predisposiciones” o como “orientación”; esto también permite introducir una tercera solución en el problema del juicio de Kant, una solución que presenta la inclusión de un particular por un particular, no ya la subsunción del universo por el particular o viceversa como se veía anteriormente. También es importante que el concepto de campos de Bourdieu permite introducir el poder en lo referente a la hermenéutica.
Por ultimo se define la comunidad como el compartir ciertos significados, en la cual en su mismo día a día se encuentre la reflexividad presente, en donde la hermenéutica se posiciona como la forma de conocer de los miembros de esa comunidad, y la consecución de fines es algo que esta dado por la misma practica de ciertas actividades en conjunto con los demás y se guían por los esquemas.

Comentario crítico Francisco Sastre

En Modernización Reflexiva de Beck, se evidencia el contexto histórico ocupado de la modernidad, pues ejecuta un enlace de diversos ecos que se han reformulado en las últimas dos décadas del Occidente Europeo. Dejando en claro que la nueva civilización dada en dicho pasaje como la “modernización reflexiva”, que es la destrucción creativa de la antigua sociedad industrial que abre vías de una modernidad distinta tomando en cuenta aspectos reformulados como la visión de la sociedad de riesgo, la individualización en la sociedad, las vías creadas y político. Sin duda todo esto es una línea de descripciones y atribuciones que Beck da a hechos que se logran vislumbrar en nuestra sociedad. Todos estos aspectos son bien declarados en la reseña de dicha obra de Beck. Sobre la sociedad de riesgo se demuestra su origen no por crisis ni luchas entre clases sociales, sino que por medio de la victoria de esta misma. En esta nueva se ven conflictos sobre la legitimación de riesgos que dan los bienes ocupados en nuestros tiempos (genéticos, químicos, ambientales) que son nombradas además de las causas de inserciones nuevas en el tema laboral y social, un cambio al tradicionalismo que se venía dando en el Occidente. Se destaca los aspectos transitorios en las áreas de referencia de esta sociedad; Relación social industrial con recursos de la naturaleza y cultura; La relación con los problemas producidos por ella; Agotamiento de significados colectivos. Pues estas áreas son las que se van describiendo. La individualización de la sociedad, de la creación de eventos en su propia biografía aparece claro en el texto como en la reseña, como desvinculación y luego al paso de revinculación a eventos de formas de vida nuevas de la sociedad industrial en sustitución de las antiguas, como también el arma de doble filo que constituye. Sin embargo es importante agregar a que ésta misma ha efectuó “el renacimiento de una subjetividad política, fuera y dentro de las instituciones” (U. Beck, 1997, Pág. 34). Éstas dan la fuerza a lo político quedan movimientos de bases y fuera de los estamentos comunes y extraparlamentarios. Sin embargo se debiera tener en claro el nuevo concepto de la ciencia política que da como consecuencia uno de los elementos importantes de Beck en estas (auto) creaciones como es la subpolítica. Entre las premisas se encuentran la organización social de sí misma, institución de comunidad; reformulación de los programas debido a los nuevos riesgos afrontar y acabar; y los repartos de poder en las colectividades.
Por otro lado los aspectos de la modernidad entre sus vías nuevas, se deja en claro la revolución de la mujer, problemas naturales que se adjuntan a lo social (ecológico) quiebra estamentos regulares que antes no se daban como efectos sociales, los nuevas mesas de diálogos, renovadas debido a la pérdida de legitimación asociada a la ambivalencia que prima en este contexto. Además l método utilizado para la creación de la obra es bien descrito en la reseña.

Reseña Luciana Becquart.

Ulrich Beck, al igual que Giddens y Lash, se centro en la teoría de la modernización reflexiva. Sin embargo, el primero de ellos considera esta modernización desde una perspectiva diferente. Para ello, nos cuestiona sobre el 1989, mediante el cual nos plantea, que no solo cayó el comunismo, sino que indica también como esto le afecto al occidente. A partir de esto se apoya en que “las instituciones fracasan victimas de su propio éxito” (U. Beck, 1997, Pág. 13), dicho de otro modo, occidente se encuentra en un dilema a causa de su propia lógica de sistema. Es así como entonces nuestro autor en cuestión, nos plantea su definición de modernización reflexiva, la cual “significa la posibilidad de una (auto) destrucción creativa de toda una época: la de la sociedad industrial. El “sujeto” de esta destrucción […] es la victoria de la modernización occidental” (U. Beck, 1997, Pág. 14). Constatamos que hace alusión a la sociedad industrial y a un cambio en la forma social que se produce ya no por crisis o luchas entre clases, sino que por medio de la victoria de esta misma. Podríamos entonces decir que esta modernidad será sustituida por una nueva modernidad mediante el efectivo desarrollo de la sociedad tanto en el ámbito político como en el económico y social (como por ejemplo lo es la inserción laboral de las mujeres). No obstante, la modernización reflexiva también puede tener, en un contexto ajeno a la suya, “consecuencias opuestas” (U. Beck, 1997, Pág. 17) como lo es el nacionalismo, las crisis económicas y ecológicas y la revolución entre otras; en tanto que se produce a su vez una sociedad de riesgo. Esta última aparece cuando los riegos se escapan “a las instituciones de control” de la sociedad industrial quedando así ésta ultima ahora obsoleta. (Falta poner las dos fases ¡!!!!). Para una mayor comprensión de la modernización reflexiva, debemos considerar que “este concepto no implica (como el adjetivo “reflexivo” podría sugerir) reflexión sino (en primer lugar) auto confrontación” (U. Beck, 1997, Pág. 18). En consecuencia, el paso de la sociedad industrial a la de riesgo surge de manera “no deseada”, es una transición de reflexividad. Esta transición de una sociedad a la otra, trae consigo cambios en la relación tanto entre “la sociedad moderna con los recursos de la naturaleza y la cultura”, como “con las amenazas y problemas producidos por ella” y por ultimo con respecto a “las fuentes de significado colectivas y especificas de grupo” (U. Beck, 1997, Pág. 20).
Para continuar con la modernización reflexiva nos encontramos con otro eje relevante: la crisis ecológica. Esta ultima no solo hace hincapié en el medioambiente, sino que también se trata de un problema institucional. Factores que traen consecuencias visibles a los ojos de la sociedad de riesgo, haciendo necesaria al mismo tiempo, una autorreflexión, volviéndose entonces una sociedad reflexiva, es el llamado “retorno de la incertidumbre”. Encontramos entonces una libertad de decisiones, lo cual hace surgir la individualización. Esta característica de la modernización, se remite a la desvinculación y luego al “proceso de revinculación a nuevas formas de vida de la sociedad industrial en sustitución de las antiguas” (U. Beck, 1997, Pág. 28). Esta individualización significa entonces el proceso de construcción de las biografías de cada uno de los individuos. En efecto cada uno se fabrica su biografía, de manera que si fracasa no involucra a nadie más que a si mismo. Es más, este proceso ocurre en un contexto donde prima el estado de bienestar. Sin embargo este ultimo, a pesar de buscar el bien social, juega al mismo tiempo un rol de doble filo, en el sentido en que condiciona las “formas de vida centradas en el ego” (U. Beck, 1997, Pág. 31). En efecto la sociedad moderna introduce la individualización, adempero no sólo en la esfera privada, sino que también hace referencia a lo publico, la política. Al interior de ésta, el autor nos señala que si bien busca “la vacuidad […] de las instituciones”, por otra parte se inclina hacia “un renacimiento no-institucional de lo político” (U. Beck, 1997, Pág. 32).
Por otra parte, se hace referencia al fatalismo tanto positivo como negativo, dado que esta corriente considera que existe tan solo un tipo de modernidad, mientras que Beck sugiere una variedad de modernidades. Para su estudio plantea una metodología y una teoría, partiendo de a base de que “todo aquel que estudie la “diferenciación funcional” de la sociedad “funcionalmente diferenciada” plantea tres problemas” (U. Beck, 1997, Pág. 42). El primero de ellos parte indicando que la diferenciación sistémica funcional, sinónimo de revolución, que permitieron el desarrollo de la sociedad moderna es por una parte la revolución feminista y por el otro la de la naturaleza. En efecto se trata del problema de “la diferenciación ulterior de la sociedad industrial” (U. Beck, 1997, Pág. 42). Pasamos así a la “mesa redonda”, en cuanto como un segundo problema que concierne a las instituciones de “mediación y negociación”. Este problema hace necesaria: “La desmonopolizacion de conocimiento experto”, “informalizacion de la jurisdicción”, “apertura de las estructuras decisorias”, “creación de una opinión publicidad parcial”,”acordarse y sancionarse normas para este proceso” (U. Beck, 1997, Pág. 42). Por último el tercer problema es constitutivo de la reforma de la racionalidad que apuntan a una síntesis de códigos para generar distintas modernidades. Entre estos encontramos, esencialmente lo que podríamos denominarle estética de la modernización reflexiva. Por un lado existen los códigos genéticos y por el otro los códigos comunicativos.
En lo que concierne a la política, antiguamente el orden estaba dado por las estructuras políticas respectivas al este y al oeste. Pero, luego en 1989, Europa carece de una verdadera política, no solo institucionalmente sino también en las áreas privadas. Para el entendimiento de la política es necesaria distinguir a esta entre ser dirigida por reglas o bien modificadora de reglas. La primera de ellas esta constituida por reglas que organizan el sistema, es decir una modernidad simple. La segunda de ellas busca como su nombre lo dice modificar sus propias reglas, nos encontramos con la denominada “política de la política”. Por otra parte mencionaremos que la política puede ser tanto oficial como subpolítica. Sin embargo consideramos importante señalar en que la política de la política se apoya en ser por esencia una política creativa la cual alude nuevas “estructuras dentro y fuera del sistema político” (U. Beck, 1997, Pág. 56). Esta nueva política trae consigo una metamorfosis del estado, haciendo de este un estado negociador.

lunes, 20 de octubre de 2008

Reseña Antonieta Neves Müller

Ambivalencia: La posibilidad de referir un objeto o suceso a mas de una categoría.
Es así como comienza el capitulo “Modernidad y ambivalencia” Zigmunt Bauman.

En este capitulo se realiza un profundo análisis de como la ambivalencia es creadora de profundos desordenes denotativos que se presenta en el lenguaje y es expresado en las profundas incomodidades que sentimos cuando no podemos interpretar la situación y con ello elegir una acción adecuada al contexto. El lenguaje integra en su forma el acto de clasificar y esto nos permite dotar al mundo de una estructura es decir que permite crear un orden en el mundo, y un mundo ordenado es el que nos permitirá dirigirnos, saber calcular probabilidades de lo que pueda acontecer.

La clasificación y por lo tanto la acción del lenguaje tiene por finalidad la prevención de la ambivalencia incluye. La clasificación en si consiste actos de inclusión y exclusión los cuales menciona Barman dividen el mundo en dos: entidades que son incluidas en una clase y otra entidades que no lo están eso quiere decir que se tratan de entidades que poseen en si un significado que es preciso y claro, en otras palabras corresponden al orden y al desorden respectivamente.

Sin embargo a pesar de que la ambivalencia es un producto negativo que proviene del mismo lenguaje, Bauman la considera como un producto natural que no es posible evitar, sin embargo es posible opacar y es aquí donde hace presencia la modernidad. La modernidad es planteada en si misma como el propósito del orden. La existencia será modera a la medida en que encontramos la bifurcación de orden y caos, en la medida que exista esa alternativa.

En aquella separación la presencia de uno es la presencia del otro, es decir, que la interrelación entre ambos es proporcional, no hay orden sin caos, y no hay caos sin orden. El estado moderno y el intelecto moderno necesitan del caos para mantener la creación del orden.

La practica moderna es el esfuerzo por exterminara la ambivalencia y por ello la intolerancia es la inclinación natural de la practica moderna. En otras palabras el propósito de la practica moderna, el intelecto moderno es combatáis explícitamente la parte exclusiva que nos lleva al caos social, y a la ambigüedad.

La temporalidad de la modernidad siempre acontece en un sentido lineal desde el pasado y el futuro, donde no hay lugar a un punto medio, el presente siempre esta obsoleto es efímero. La lucha contra el caos es un suceso que ocurre a través del tiempo. La modernidad es producción de orden mientras que al contrario la ambivalencia es solo el desperdicio de esta.
Ambos, el orden y la ambivalencia son el producto de la modernidad. Son las formas negativas y positivas en como la modernidad y la sociedad se desenvuelven en el tiempo.

Bauman indica que el conocimiento puede ser poseído a través de las oposiciones como es el caso de los amigos y los enemigos, en donde aparentemente existe una simetría, es decir, no hay amigos sin enemigos, y no habría amigos si no existiera ese abismo abierto d hostilidad. Los primeros son la negación de los segundos y viceversa.

En una segunda parte Bauman comienza a analizar como toda esta ambivalencia se pone a prueba cuando nos encontramos en otros territorios. En estas ocasiones es común que ocurrir situaciones que son molestas a nuestra experiencia, se genera incertidumbre y comprobamos que muchas veces las palabras y el significado no refieren a la misma cosa (aparecen los problemas hermenéuticos, como el autor denomina). La separacion territorial es un reflejo de los problemas hermenéuticos existentes, y tal medida es tomada para proteger a los individuos de lo que no le es familiar.


En las sociedades premodernas los miembros se distinguen por lo que llaman una sociedad densa.

La armonía y la hostilidad forman un conjunto en donde la sociabilidad tiene lugar, sin embargo en la sociabilidad densa esta armonía se ve opacada al encontrarse una gran cantidad de amigos y enemigos. La ambivalencia como parte de la sociedad moderna se ve reflejada en la individualización y la separación de las sociedades.

A modo de conclusión el texto de Bauman refleja la importancia del lenguaje y la acción como desarrollo social, y como la ambivalencia forma parte natural del proceso evolutivo de las sociedades. La presencia del lenguaje señala como los individuos podemos familiarizarnos con el entorno y hacerlo nuestro, mientras que la ambivalencia crea episodios que nos incomoda y que aun así es necesario para poder superarlo y acomodarnos a las distintas situaciones que acontecen en la cotidianeidad.

viernes, 17 de octubre de 2008

Cometario Crítico Sahara Martignoni

Sería bueno incluir en la reseña del texto “La Construcción de la Sociedad”, que para Giddens, queda evidenciado en su trabajo, es muy importante el contexto histórico en que se desarrolla la sociedad, y por ende, también la teoría social. Para lograr crear la “Teoría de la Estructuración”, Giddens va incorporando aportes de algunos actores, pero para eso los contextualiza, es decir, los sitúa en ciertas corrientes de la época.
Para Giddens hay dos posturas en teoría social con respecto a “las concepciones sobre el ser y el hacer del hombre, sobre la reproducción social y la transformación social”[1], por una parte tenemos al objetivismo (el estructuralismo y el funcionalismo), y por la otra el subjetivismo (la hermenéutica y la fenomenología). Mientras el estructuralismo y el funcionalismo adhieren al naturalismo, y “proponen un imperialismo del objeto social”[2], la hermenéutica y la fenomenología son humanistas y mayor importancia al sujeto. Del punto anterior, Giddens toma uno de sus objetivos al formular la “Teoría de la Estructuración”, una de sus ambiciones es terminar con esta idea totalizadora imperialista de las dos corrientes, es decir, el dualismo arraigado entre objetivismo y subjetivismo en la teoría social.
También sería necesario, como otro punto, introducir en la reseña la explicación que da Giddens sobre la importancia del factor tiempo-espacio en su teoría, obtenido del trabajo de Goffman, ya que es importante comprenderlo como introductoria a lo que rescata posteriormente de Garfinkel sobre los escenarios de interacción, explicado en la reseña. Para Giddens la rutinización de la actividad, de las acciones y la repetición de estas en la vida cotidiana en un espacio-tiempo, se conecta la parte inconsciente de los actos de los individuos y la copresencia. Esto nos lleva, por otra parte, a considerar indispensable la postura del sujeto en los encuentros sociales, entendido por Goffman como un “conjunto de observaciones en extremo sutil pero elocuente sobre el trabajo facial, sobre gestos y el gobierno reflexivo del movimiento del cuerpo, como algo intrínseco a la continuidad de la vida”[3], pero también referida a la serialidad de encuentros por un espacio-tiempo. Todo lo anterior Giddens lo introduce al contexto de las instituciones sociales, es decir, las posturas ya no son solo a nivel de relación con otros, sino que también lo es en el contexto de la interacción social.
Como podemos ver, de este modo Giddens llega a la importancia que tiene la contextualidad de la interacción social, no solo en un aspecto regionalizador, como lo propone Goffman, sino que también como escenarios de interacción que los actores utilizan para dar sustento a un sentido en actos comunicativos.
Con estos dos puntos se podría introducir el contexto en la reseña para entender de mejor manera desde donde obtiene Giddens algunos conceptos e ideas.
[1] Giddens, Anthony “La Constitución de la sociedad”, Introducción, pp. 21
[2] Idem, Capitulo I, pp. 40
[3] Idem, Introducción, pp. 25

jueves, 16 de octubre de 2008

Reseña Silvana Suerez

El lenguaje y sentido de la comprensión de la acción humana tiene largas tradiciones:
1.- La filosofía de la hermenéutica; estudio de la conducta humana con una diferenciación de los problemas de la Ciencias Naturales y Ciencias Sociales.
2.- Otra corriente de pensamiento filosófico es el lenguaje ordinario de Austin; y su desarrollo posterior, como Wittgenstein, con los cuales tuvieron dudas sobre la hermenéutica.
3.- La fenomenología; intermedia entre la primera y la segunda. Ya que los escritos de Shutz se basan en gran medida de los de Husserl pero también combinando a Weber logrando así la tradición Geisteswissenschaften. Por otro lado la obra de Garfinkel, comienza con Shutz y relacionando con Austin y la escuela de Wittgenstein son el estimulo principal para los trabajos de Winch.
La fenomenología existencial de Shutz: Hablar de fenomenología no se refiere a un cuerpo unificado ya que se pueden desprender muchas vertientes partiendo por las de Husserl y las variadas interpretaciones que tomaron sus discípulos como Scheler, Heidegger, Merleau-ponty o Sarte. Pero estos últimos tomaron una posición más psicológica del sujeto.
Giddens plantea que Shutz es incapaz de construir la realidad social como un mundo objetivo. El autor plantea que no es necesario cuestionarse sobre si se debe hacer sociología fenomenológica o no. Sino que el problema es construir fenomenológicamente realidad externas de la realidad social.
La etnometodología de Garfinkel se aproxima a Shutz para hacer una referencia práctica de los estudios de investigación. En la cual el pretende hacer énfasis en estos estudios, ya que, su obra pretende proveer las descripciones de expresiones iníciales. Además Garfinkel nos explica que no es posible alguna descripción extensa de interpretación en las presuposiciones.
Giddens plantea que las diversas escuelas convergen en el análisis de su estudio de las del método sociológico , porque, como lo plantea Shutz la escuela de Verstehen no es una técnica especifica de los cientistas sociales , sino , de las interacciones sociales, me explico, en circunstancias determinas ambos utilizamos los mismo elementos para comprender la conducta que se propone analizar. Y finalmente para producir un mundo social provisto de sentido se recurre al saber pragmático (que esta implícito o se da por sabido). Todas estas definiciones las explica Giddens a lo largo de todo su libro. Pero todas estas premisas tienen en común que ven la acción como sentido y no como praxis, por tanto estos individuos tienen un interés por las transformaciones materiales de la naturaleza de las actividades humanas. En estas relaciones de actividades humanas no se produce una centralidad del poder en la vida social, me explico, hasta una simple conversación entre dos personas es una relación de poder que puede aportar recursos desiguales.
La Hermenéutica y teoría crítica: tanto Apel como Habermas han reconocido una convergencia entre las tendencias contemporáneas por la filosofía de la hermenéutica y la ruptura de empirismo lógico, señaladas por la filosofía Postwittgensteiniana.
Habermas recurrió mucho a los escritos de Gadamer que se dedicaba a estudiar y vincular la hermenéutica con otras formas de análisis de las ciencias sociales el cual plantea lo siguiente, al igual que Winch. Se hace necesario que para las investigaciones tanto de las ciencias naturales como de las ciencias sociales no puede, ser puramente hermenéutico, solo podría ocurrir lo anteriormente mencionado en un mundo totalmente transparente de racionalidad hegeliana.
Para Habermas sin embargo las ciencias sociales son hermenéuticas y nomologicas. Y estas dos variedades mencionadas se deben unir con una tercera vertiente, que es la teoría crítica. Es en esta teoría donde nace la noción de competencia comunicativa. Aquí de distinguen dos características generales del lenguaje ordinario que son básicas para la competencia comunicativa. La primera proviene de Austin que son la posesión de una variedad de performativos que caracterizan las situaciones del habla y segundo los elementos deícticos que caracterizan la reacción del hablante y su relación con la situación de comunicación.
El problema de la teoría crítica es que se construye en un diálogo idealizado (simétrico), el cual pareciera tomar un acuerdo al que llegan a un debate racional. Pero no se aclara en las circunstancias donde la dominación explotadora distribuye recursos escasos. Lo importante que esto, es por sus escasas indicaciones de las relaciones de acción humana con propiedades estructurales de instituciones sociales.
Giddens plantea que lo interesante de Habermas es que parece seguir a los filósofos poswittgensteinianos al asimilar el sentido a la interpretación de una acción intencional.
Capitulo II
Para el problema de obrar se hace necesario aludir al concepto de acción, donde un gran numero de filósofos a centrado el concepto de acción como una conducta dotada de sentido. La acción es una acumulación de experiencias vividas, su categorización depende un proceso reflexivo de la atención de actor. Giddens define acción u obrar como la “la corriente de interpretaciones causales reales o contempladas de seres corpóreos en el proceso corriente de sucesos en el mundo” A. Giddens. Las nuevas regalas del método sociológico.1997.pag.97.
Intenciones y proyecto: ambos conceptos no debería ser involucrados a orientaciones hacia a una meta, que se tiene en la mente a conciencia. Como si el personaje u actor no debiera prepararse para el fin que debe alcanzar. La mayor parte de la conducta cotidiana es prerreflexiva. Giddens define como intencional “cualquier acto del cual un agente sea (crea) que pueda esperar que manifieste un cualidad o un resultado particular, y en el cual este acontecimiento sea utilizado por el actor con el fin de producir esta cualidad o este resultado.” A. Giddens. Las nuevas regalas del método sociológico.1997.pag.99.
La racionalización de la acción: es una regulación reflexiva de la conducta del agente, las razones son el principio fundador de una acción, donde los individuos mantienen regulación de su conducta reflexiva.
Sentido e intención comunicativa: podríamos decir que un acto comunicativo es donde el actor, intenta pasar la información a otros. Es importante hacer notar la diferencia entre, entender los que alguien hace y entender como otros entienden lo que él dice o realiza en los actos de intención comunicativa. Por esto es importante como plantea Giddens, “la comunicación de sentido de una interacción plantea problemas que en alguna medida son separables de lo que se refiere a la identificación de un sentido no comunicativo”. A.Giddens. Las nuevas regalas del método sociológico.1997.pag .116

miércoles, 15 de octubre de 2008

Reseña Francisco silva

Giddens comienza su texto apartándose de la tradición positivista existente en la sociología. Plantea que es erróneo pensar a esta ciencia social, como una ciencia de leyes generales y generalizaciones aplicadas a todo ámbito que pudiese presentarse. “Descubrir generalizaciones no es el alfa y el omega de la teoría social”[1]. Así señala que la gran mayoría de las preguntas que se realizan en torno a la sociología, no encuentran respuesta en las generalizaciones, por lo tanto seguir ese camino es errado a la hora de encontrar un camino a seguir en la sociología.

La propuesta de Giddens para la sociología es clara, concentrar sus esfuerzos en las acciones de los individuos, en como se da la reproducción social y la transformación de esta ultima. Es de esta manera que propone la “Teoría de la Estructuración”, donde el autor nos menciona que existe una estructura que funciona como un conjunto de recursos y reglas. Dicha estructura forma una dualidad con los agentes o actores sociales, esto quiere decir que la estructura surge como resultado de los agentes y la estructura funciona a su vez como un medio y como un resultado de las prácticas de los actores. La estructura depende de que los individuos la continúen reproduciendo a través de la constante rutina que estos realizan a diario, este concepto de rutina es uno de los fundamentales en la teoría de estructuración, ya que señala que todo lo que se haga de manera habitual y repetidamente en el tiempo se transforma en rutina, de esta manera se mantiene la recursividad de la vida social, trascendiendo en el tiempo la estructura generada por los actores.
A pesar de incluir en su teoría el término estructura, esta no tiene mayor relación con el estructuralismo, la vida social para Giddens no esta determinada por una estructura ajena a los sujetos y de la cual estos no tienen conciencia, sino mas bien se da en las distintas interacciones que se dan entre individuos, las cuales están presentes en las actividades cotidianas que estos realizan. Así el concepto de estructura para Giddens tiene un significado completamente distinto del tradicional que se le da en la sociología. En la “Teoría de la Estructuración” se plantea que la estructura es “reglas y recursos con implicación recursiva en una reproducción social”[2], con recursos el autor se refiere a medios a los que el actor accede para influir en las interacciones, a su vez los recursos funcionan para implantar las reglas y con el fin de ocupar los recursos, es de esta manera que se van generando propiedades estructurales a través de la interacción entre sujetos, solo si estas ultimas son mantenidas en el tiempo y en un espacio determinado. Estas propiedades estructurales, también llamadas “instituciones sociales”, son entonces directa consecuencia de las prácticas rutinarias de los actores sociales.
Para realizar las practicas rutinarias y las interacciones los actores sociales necesitan de escenarios de interacciones, aquí Giddens utiliza los estudios de Garfinkel para ilustrar que los individuos ocupan distintos escenarios para llevar a cabo a la interacción los cuales tienen un carácter tácito y son fácilmente reconocibles para los actores, es decir, los actores tienen un conocimiento compartido para traducir en forma apropiada las distintas practicas que se dan en una interacción.

La teoría de la estructuración al estar centrada en las interacciones realizadas por los sujetos, se hace necesario explicar el como surgen las acciones que los sujetos o actores realizan. En este sentido el autor señala que la acción y el poder están estrechamente relacionados, ya que para realizar una acción es necesario estar en condiciones de efectuarla o en el caso opuesto, abstenerse de realizarla. Así para el autor la accion “nace de la aptitud del individuo para producir una diferencia en un estado de cosas o curso de sucesos preexistentes” [3] De esta manera para Giddens la acción no es una combinación de actos como para otros autores, esta presenta un motivo, una reflexividad y racionalidad. La racionalidad nos muestra la sección de la acción que tiene una intencionalidad por parte del actor social, se hace esta diferencia de acción intencional pues para el autor existen acciones que no son buscadas por el individuo, las que son llamadas condiciones inadvertidas de la acción. También encontramos que la acción social cuenta con un motivo, en este caso el actor social tiene una directa influencia en la acción pues ese era su propósito, el resultado puede ser el que esperaba u otro totalmente diferente, esto en no modifica el motivo inicial del actor, pues la acción ya se ha realizado. Para el autor toda acción nace de la intención del individuo de producir una transformación, el resultado puede ser totalmente inesperado como ya se ha mencionado, pero este elemento no le quita validez a la acción.


[1] La Constitución de la sociedad – Introducción. Pág. 20
[2] La Constitución de la sociedad – Introducción. Pág. 32
[3] La Constitución de la sociedad – Elementos de la teoría de la estructuración. Pág. 51

Reseña Daniel Espinoza

Habermas nos entrega ciertas tareas que considera necesarias para una teoría crítica de la sociedad. De esta forma, se cuestiona si es necesario o posible encontrar en las ciencias sociales actuales algún sustituto de la teoría del valor de Marx, que permita generar distintas relaciones entre teorías relativas con las dimensiones “sistema” y “mundo de la vida”.

El autor pretende demostrar como es posible analizar ciertos procesos de abstracción que Marx consideraba reales e indispensables mediante la no utilización de un equivalente a su teoría del valor. Según este, la teoría de Marx conllevo a una exigencia metodologica, en donde, todo sistema que desembocara correctamente bajo una descripción sistémica debía y podía entenderse como un proceso basado en la cosificación del trabajo.

Podemos ver que en el crecimiento del poder monetario-burocrático surgen ciertos desajustes que afectan a distintos ámbitos, incluidos ámbitos de acción que no son capaces de ajustarse a mecanismos de integración sistémica sin antes producir, en palabras de Habermas, efectos laterales patológicos.

Habermas también se basa en la teoría de Parsons y mediante esta crea la hipótesis de que los limites mencionados anteriormente se pueden superar con la introducción e integración de los aportes sistémicos en los planos relacionados con la integración social, la reproducción cultural y por ultimo, la socialización.

Los aportes metodológicos que nos otorga Habermas apuntan directamente a una forma de explicación conceptual, en donde, pretende dilucidar que significa para toda reproducción simbólica que la acción comunicativa se vea permutada por otro tipo de acciones ordenadas por medios. Esto lo podemos ver, en “que el lenguaje sea sustituido por medios como el dinero y el poder en su función de coordinar la acción”. (Habermas (1999), Teoría de la acción comunicativa II: critica de la razón funcionalista, Pág.529).

Con esto, al intentar introducir la acción sobre un mecanismo de coordinación distinto al de su propia acción, solo conseguiremos una cosificación, que vendría siendo una especie de desconfiguracion patológica de los fundamentos comunicativos del mundo de la vida.

Esto es preponderante en la teoría de Habermas, ya que, este plantea que la cosificación y las “abstracciones reales” pasan a constituir un ámbito objetual independiente, o sea, objetos capaces de ser investigados empíricamente sin la necesidad de otras teorías, como en el caso de la teoría del valor en Marx.

La teoría critica por medio de la acción comunicativa que plantea Habermas, señala que las ciencias sociales no han sido capaces de desentrañar los inconvenientes de la racionalización social debido a que no hace mas que convertir en objeto a estos sistemas sociales, sin darse cuenta que son y están configurados históricamente en el mundo de la vida.

Habermas plantea que existen tres líneas de investigación que se encargan de afrontar los fenómenos de las sociedades modernas, sin embargo, también señala que estas jamás se topan porque se tratan de “abstracciones unilaterales” que cortan la conexión entre el sistema y el mundo de la vida. Esta conexión es esencial para poder comprender a las sociedades modernas.

1era línea: Basada en la teoría de Weber y la historiográfica marxista; según Habermas es de tipo comparativa y se basa en la historia social, posee un centro teórico construido por supuestos de diferenciación estructural, en donde, la modernización queda disminuida al mero plano de una diferenciación institucional. De acuerdo a esto, es imposible percibir la complejidad de ciertas patologías de la modernidad, tales como una correcta distinción estructural de los componentes sociales del mundo de la vida.

2da línea: El autor hace una critica a la teoría de Parsons y Luhmann señalando que una teoría sistémica de la sociedad, al ver el desarrollo de las sociedades modernas bajo un único enfoque funcionalista de las complejidades sistémicas, es inconsistente e insensible a patologías sociales como las estructuras de acción socialmente integradas.

3era línea: A partir del interaccionismo simbólico y de la fenomenologia de la hermenéutica basa sus estudios en ciertos estados de la teoría de la acción. Aquí, los procesos que dan origen a la modernización quedan reducidos a la historia de aquellos actores que deben hacer frente al mundo de la vida cotidiana. Lo que no permite comprender cabalmente ciertas patologías del carácter subjetivo de la construcción social.

Habermas mediante un estudio interdisciplinario presenta un marco de investigación, el cual posee su mayor alcance en la identificación y explicación de las patologías de la modernidad. Para esto, propone repasar tres temas que considera fundamentales:

- El espectro de temas relacionados con la primera teoría critica: Destacan los aportes de Horkheimer y otros estudiosos que propusieron una ciencia social interdisciplinar y la conversión de las “abstracciones reales en objetos de investigación empírica” (Habermas (1999), Teoría de la acción comunicativa II: critica de la razón funcionalista, Pág.535). Se puede observar una pluralidad entre temas tales como la socialización de las familias, la medios de comunicación de masas, la psicología social de protestas, la teoría del arte, entre otras.

- Puntos de unión para una teoría de la acción comunicativa: Siguiendo a Weber y Marx en el camino evolutivo del capitalismo, Habermas señala que la condición principal para cualquier proceso de modernización es la racionalización del mundo de la vida. Este es el grado de diferenciación que podemos observar en las sociedades modernas. El autor remarca el hecho de que los desajustes del mundo de la vida solo se transforman en cosificaciones de las relaciones comunicativas en las sociedades que trasladan las crisis a este mundo de la vida, o sea, las sociedades modernas. Desde la psicología social el autor plantea que la comunicaciones llevadas a cabo en un núcleo familiar están condicionadas por una especie de socialización más exigente. En relación a los medios de comunicación, destaca el que estos permiten la trascendencia de los procesos comunicativos en el tiempo.

- La teoría de la racionalidad y su contexto histórico: Para Habermas la teoría de la racionalidad y la acción comunicativa dan paso a otra alternativa respecto de la tan utilizada filosofía de la historia. Con esto, los aportes interdisciplinarios ayudan a comprender de una mejor manera el proceso de racionalización en las sociedades modernas. Por otra parte se realiza un rechazo a las pretensiones fundamentalistas, en donde, las estructuras que componen y rigen el mundo de la vida “tiene que hacer explicito un saber de fondo sobre el que nadie puede disponer a voluntad” (Habermas (1999), Teoría de la acción comunicativa II: critica de la razón funcionalista, Pág.568).

miércoles, 8 de octubre de 2008

Reseña Tamara Mundaca

Como introducción a la teoría de la acción comunicativa II de Habermas, Parsons interpreta el concepto de sociedad y el del mundo de la vida de la teoría de la acción a partir de una visión más bien sistémica del mismo: los tres temas estructurales importantes que componen al mundo de la vida son la cultura, la personalidad y la sociedad, que vienen a ser así entendidas como subsistemas de un sistema general de acción[1]. A partir de esta idea, es que Habermas propone un concepto del mundo de la vida que se basa en la idea de que este es un componente fundamental de la acción comunicativa, y busca en este texto establecer la diferencia metodológica entre el lado externo y el lado interno de este concepto.
Para entender la diferenciación producida entre la visión interna y la externa, el enfoque debe centrarse en las relaciones que transformarán ambas perspectivas, esto es, las relaciones entre el aumento de la complejidad del sistema y el aumento de la racionalización del mundo de la vida.
La perspectiva interna viene a ser la del participante, miembro activo del mundo de la vida, que solo puede estudiarla a partir de la sociedad, con un sistema institucional establecido en ella. Desde esta perspectiva, la cultura y la personalidad, estructurantes del mundo de la vida para Parsons, no son más que entorno (siguiendo con la idea de un análisis sistémico) para Habermas.
Desde una perspectiva externa, el mundo de la vida se analiza a partir de la estructura que la conforma, siendo estos subsistemas estructurales sólo diferenciaciones en el conjunto general del que se habla. A partir de la metodología, las estructuras también deben ser capaces de desarrollar una teoría de la comunicación que sustente el conocimiento compartido de los sujetos que en el mundo de la vida viven. Esto es comprendido a través de un proceso de evolución social, que se produce cuando el grado de diferenciación en una sociedad (primitiva) es escaso, y todavía se relaciona con los mecanismos de la integración social, luego complejizándose en una sociedad moderna que genera la diferenciación de la que ya se hablaba, surgiendo también espacios de organización formal y relaciones sociales regidas por medios que ya no tienen como característica principal producir identidad.
Como se menciona anteriormente, para Habermas va aparejado a un proceso de complejización del sistema y de racionalización del mundo de la vida, en donde este último viene a ser lo que le da consistencia al sistema social.
Los distintos modelos que los teóricos a lo largo del tiempo han hecho sobre el mundo de la vida, buscan primordialmente una distinción entre las estructuras que la contienen y la conexión que esta tiene para los presupuestos de una acción comunicativa, razón que intenta explicar Habermas al mostrar cómo las imágenes míticas del mundo borran las diferencias categoriales entre el mundo objetivo, mundo social, y mundo subjetivo, y cómo ni siquiera establecen un corte claro entre las interpretaciones del mundo y la realidad.[2]
Es por esto que Habermas reconoce cuatro mecanismos de características sistémicas que se han sucedido evolutivamente para dar paso a nuevos niveles de integración en la sociedad; estos son la diferenciación segmentaria, 2) la estratificación, 3) la organización estatal, y 4) medio de control sistémico, en donde simultáneamente, la racionalidad ha aumentado por la progresiva liberación del potencial comunicativo de la acción.
Mientras los mecanismos sistémicos y los que se preocupan de la integración social estén anclados a estructuras sociales previamente dadas, no podrán diferenciarse, debiéndose producir para ello un desligamiento de las estructuras existentes, lo que significa que la complejidad solo aumenta cuando es introducido un nuevo mecanismo sistémico.
Así también, a partir de las formaciones sociales, no podemos distinguirlas únicamente por su grado de complejidad sistémica.
Estas están definidos por complejos de instituciones, diferenciándose de forma segmentaria en cuatro etapas: 1) Sociedades primitivas igualitarias, 2) Sociedades primitivas jerarquizadas, 3) Sociedades de clases, políticamente estratificadas y 4) sociedades de clase, económicamente instituidas.
Todo lo anterior demuestra la progresiva autonomización a la cual se ven inmersos los componentes atribuidos al mundo de la vida, que son generados por la misma diferenciación metodológica que se hace en primera instancia.
La evolución moral y jurídica de una sociedad también genera una alteración en el proceso de integración de la que son partes las sociedades, ya que altera los valores morales de los cuales se rige cualquier sociedad, generalizándolos. Simultáneamente a ellos, la acción comunicativa se desliga de los valores morales que antes los unía y se demuestra así el desacoplamiento que se produce entre la integración sistémica y el desacoplamiento estructural, que también asume un cambio entre los mecanismos de coordinación de la acción.
El estudio sistemático que plantea Habermas también se traduce a las formas de entendimiento que limitan este concepto de sociedad y las formas de comunicación que en ella (establecida por una evolución social) se producen, siendo primordial la distinción para una comprensión de la teoría de la comunicación que propone.
[1] “Teoría de la acción comunicativa II”, critica de la razón funcionalista, Habermas, año 1999
Pp216.
[2]“Teoría de la acción comunicativa II”, critica de la razón funcionalista, Habermas, año 1999
pp. 224.